El gobierno de Puerto Rico, liderado por Jenniffer González, ha hecho un cambio importante al desmantelar un grupo de trabajo creado por la gestión anterior bajo Pedro Pierluisi, sustituyéndolo con un renovado Comité de Reconstrucción. Esta acción representa un ajuste en la política del Ejecutivo para administrar los recursos federales destinados a la recuperación de la isla después de los desastres naturales que la han golpeado en tiempos recientes.
El movimiento surge como respuesta a las críticas sobre la falta de rapidez y claridad en la gestión de proyectos que reciben apoyo de fondos federales, especialmente los relacionados con infraestructura, vivienda y recuperación energética. González ha expresado su propósito de modificar el proceso, optimizar su eficiencia y asegurar que los recursos lleguen de forma más directa a las comunidades impactadas.
El nuevo comité tendrá la responsabilidad de supervisar, evaluar y coordinar todos los proyectos relacionados con la reconstrucción, asegurando que se cumplan los estándares de cumplimiento y eficiencia exigidos tanto por las autoridades federales como por la ciudadanía. Esta estructura renovada incluirá expertos de diferentes áreas y representantes de sectores públicos y privados, con el propósito de establecer un modelo más inclusivo y con mayor rendición de cuentas.
Aparte de la rehabilitación física, el comité también se centrará significativamente en la reforma energética de Puerto Rico, un elemento esencial en los proyectos a largo plazo del gobierno actual. La supervisión del contrato con la empresa responsable del sistema eléctrico y las posibles opciones energéticas estarán igualmente bajo evaluación por parte del nuevo grupo de trabajo.
La elección de González demuestra un esfuerzo por diferenciarse del mandato previo, reorganizar las prioridades y tomar el control directo sobre las iniciativas de recuperación, mediante una estructura renovada que pueda responder de forma más rápida a las necesidades del país. La gobernadora ha indicado que este es solo el comienzo de una serie de transformaciones para actualizar la gestión pública y restablecer la confianza de los ciudadanos en el manejo correcto de los recursos públicos.
Con esta reorganización, se espera que se acelere el ritmo de los proyectos estancados, se optimice el uso de los recursos y se minimicen los errores administrativos que en el pasado han entorpecido la reconstrucción de la isla. El comité también tendrá entre sus funciones la actualización del inventario de obras pendientes y el monitoreo permanente de los avances, con informes periódicos que serán compartidos públicamente.
La creación de este comité representa un giro estratégico en el manejo de la política pública en materia de recuperación postdesastre, y podría redefinir la forma en que el gobierno de Puerto Rico se relaciona con las agencias federales y con las comunidades más afectadas por los fenómenos naturales.